La gran noticia del día fue que Eruviel Ávila será el candidato del PRI para gobernador del Estado de México. El hecho de que fuera él nos sorprendió a todos, porque hubiéramos esperado que la candidatura se quedara con alguien más cercano al gobernador Enrique Peña Nieto.
Eruviel Ávila proviene de una familia humilde de Ecatepec. Su papá manejaba un pesero - donde el cobraba los pasajes - y después se convirtió en vidriero. Estudió Derecho en la UNAM, y ahí mismo hizo una maestría y un doctorado también en Derecho.
Es un personaje muy popular; ha ganado, nada más, las 4 elecciones en las que ha participado: dos veces diputado local, y 2 veces alcalde de Ecatepec.
Una vez más, el gobernador Peña Nieto demostró que es un político de altura, que no se deja influenciar por sus intereses personales. En vez de apuntalar la candidatura de un hombre de su círculo, privilegió que se quedara en alguien que es muy capaz, y que era la mejor opción. Se necesita ser un verdadero hombre de estado, un demócrata para saber cuándo es necesario dejar a un lado las preferencias personales.
Excelente señal, que solamente refuerza nuestra confianza en Enrique Peña Nieto.
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